Continuará
“Ya no se trata de discutir para saber si lo que se ve es bello o feo, si el artista tiene o no talento, si sabe o no pintar, sino que se trata de decidir si lo que se ve es o no arte, si su autor es o no un artista y, accesoriamente, cuales son los criterios pertinentes en materia de arte.” Nathalie Heinich
“Para nosotros el arte es una aventura en un mundo desconocido que pueden explorar solamente quienes están dispuestos a correr riesgos.” Mark Rothko
“La aurora nos encuentra místicos en nuestras mortajas, corazón junto a corazón…” Jack Kerouac (Los subterráneos)
La instalación que presenta Mercedes Bustelo en la Sala 2 del Sute es en realidad un site specific, o sea, la concreción de un proyecto pensado y diseñado para ser exhibido en este lugar en particular.
Por otro lado este site specific es un work in progress, o sea, un trabajo que está en proceso y que no concluye en esta muestra; por lo cual lo que está en la sala, además de no estar terminado, es parte del proceso de este proyecto que se verá concluido en una próxima muestra.
Este trabajo consta de tres unidades independientes que a su vez interactúan entre sí comunicándose. M.B. utiliza el dibujo y la pintura de espaldas al formalismo modernista, ya que los medios históricos utilizados están contaminados entre sí, rompiendo los límites entre el dibujo y la pintura, vinculando todo a su estrategia de trabajo en procesos.
En los dibujos se puede observar un rasgo de expresión poética, de una introspección algo bucólica, mínima, repetitiva y sutil.
La pintura es una pintura abstracta-geométrica-constructiva pero sin contenido, despojada de significados más allá de lo visual, como excluyendo lo que no se necesita y al símbolo. La serie de pinturas no está terminada. De los 55 bastidores que exhibe, solo 3 son los que están finalizados, el resto solo está planteado a modo de dibujos.
La primera de las unidades es una serie de hojas de papel craft de gran tamaño pintadas de color blanco, en donde está trazada una línea con lápiz que en algún punto del espacio se desarrolla como algunos de los dibujos presentados por Mercedes Bustelo en una muestra anterior (*). La línea se continúa luego en la pared y pasa a la segunda unidad, ubicada en el fondo de la sala, donde se desarrolla como códigos secretos que no tienen traducción, nuevamente la línea continúa su recorrido hasta la tercera unidad, donde se encuentran los pequeños bastidores que forman un políptico y luego la línea muere dentro de dos dibujos enmarcados.
Todo está ordenado como intentando imponer un modo racional sobre las cosas, aunque el óleo y guache se craquelen y las líneas sean hechas a mano alzada. Hay un acto casi obsesivo en la repetición, en la búsqueda de lograr mucho con poco.
M.B. en otras oportunidades ha presentado trabajos realizados con otros medios. Los artistas de su generación ya no están atados a un solo lenguaje y pasan a ejercer sus prácticas en formato video o pintura, instalación o performance, fotografía o escultura, acciones o dibujos, incluso música o poesía, con total convicción de que ya no es el medio lo que importa y sí el contenido. Incluso dentro de su propia obra M.B. pasa del blanco al flúo, del lápiz al óleo, del bastidor a la pared; no hay límite y justo es decir que en el arte contemporáneo no hay límite.
Gustavo Tabares
(*) Muestra realizada por M.B. en la sala de exposiciones de Meridiano, en 2006.
